Informe/ La Sedap aboga por planificar la atención hospitalaria con criterios racionales, según la población de referencia y su estado de salud

El hospital que necesita la atención primaria

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El modelo debe adaptarse a la cronicidad y estrechar lazos con el primer nivel

Proponen espacios para pacientes pluripatológicos liderados por internistas

E.M.C. Madrid Los directivos de atención primaria no acaban de confiar en los acuerdos y las palabras sobre el desarrollo de este nivel asistencial por una sencilla razón: “Los hechos nos dicen que la AP no es tan importante”, asegura Marta Aguilera, presidenta de la Sociedad Española de Atención Primaria (Sedap), que esta semana se reúne en Málaga en el XIV Congreso Nacional de la sociedad científica. Les sobran las razones para llegar a esta conclusión. De entrada, asegura la presidenta, el gasto en los hospitales ha crecido en más de un tres por ciento en los últimos años, frente al estancamiento de la atención primaria en el 15 por ciento, muy lejos de la quimera que supone el reclamado 25. Pero al margen de peticiones históricas, que aún resuenan como un eco de la primera conferencia de AP, el congreso de la Sedap analiza en estos días la transformación del modelo hospitalario que exige una nueva realidad orientada a la atención a los enfermos crónicos, el complemento perfecto para la primaria. El tercer informe de esta sociedad científica recoge su particular propuesta, que ha sido formulada con las aportaciones de los miembros de la sociedad sobre las respuestas de 15 sociedades científicas de AP y especializada, un 45 por ciento de las entidades a las que se les remitió el cuestionario. En este documento, que la Sedap puso en marcha tras analizar los retos de la AP y la integración de los niveles asistenciales en ediciones anteriores, los directivos abogan por planificar y reorganizar los hospitales con criterios racionales, según la población de referencia, sus necesidades sanitarias, la cartera de servicios y los rendimientos. En la misma línea, sugieren abrir vías de colaboración privada para la reposición tecnológica, así como impulsar la gestión por procesos en atención primaria, integrada con hospitales y redes hospitalarias que suscribirían alianzas para dar cobertura a todas las necesidades evitando costosas duplicidades. Asimismo, los directivos reclaman un esfuerzo conjunto del entorno hospitalario y los profesionales de AP para dar respuesta al desafío de la cronicidad: “Los primeros deben ser conscientes de que la mayoría de las patologías deben resolverse en atención primaria; los segundos, de que si hay complicaciones el protagonismo debe pasar al especialista”, sostiene Aguilera. Por otra parte, los directivos de primaria proponen habilitar en los hospitales espacios para pacientes pluripatológicos coordinados por internistas, además de potenciar líneas de investigación comunes entre ambos niveles lideradas según el peso de cada área. De forma complementaria, recuerda la presidenta, “la AP debe ser más resolutiva, con herramientas para ello, comprometerse a reducir las derivaciones injustificadas y asumir el papel relevante de enfermería”. Los gerentes de primaria insisten en que hace falta un cambio cultural a todos los niveles para dar respuesta a las nuevas necesidades: “No se puede hacer lo mismo y esperar que las cosas cambien”, asegura la presidenta. Para ello, insisten en que es preciso un marco político que refuerce el compromiso de todos los agentes, “el archiconocido Pacto por la Sanidad”, recuerda Aguilera, pero también en los centros y hospitales, de manera que los directivos asuman su labor facilitadora del cambio en las organizaciones. Los gestores del primer nivel también reclaman la revisión de la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud. “Una parte de las prestaciones son comunes en atención primaria y especializada y habría que avanzar con una cartera común a ambos niveles”, sostiene Aguilera, que recuerda que otro reto importante es mejorar la productividad: “Hay que sacar rentabilidad de los grandes profesionales y ligar los sueldos a resultados”, subraya. En el desarrollo de este informe, las sociedades científicas participantes han realizado importantes aportaciones, según destaca la presidenta. La mayoría de ellas coinciden, por ejemplo, en la necesidad de definir un circuito para pacientes pluripatológicos y complejos que necesiten atención hospitalaria, de manera que puedan evitar pasar por el servicio de urgencias. Además, introducen un matiz en la reorientación de los hospitales, y es que creen que no es preciso construir centros de crónicos, sino simplemente dedicar servicios. En relación a la financiación, consideran que el 80 por ciento debe ser capitativa, con un 20 por ciento destinado al pago por actividad para cubrir las colaboraciones entre los centros. Eso sí, las sociedades insisten en contar con presupuestos separados, para evitar que el hospital “fagocite” la AP. Aunque la crisis complica el panorama, las sociedades científicas inciden en que los gestores no deben dedicarse en exclusiva a “apagar fuegos”, sino que han de trabajar con objetivos a corto, medio y largo plazo. | 2011-10-23T08:00:00+02:00 h |

Los directivos defienden potenciar la cartera de servicios común a primaria y especializada

Plantean un circuito que evite pasar por urgencias en el agravamiento de la patología crónica