Se nota que la realidad económica que se prevé para 2009 no es la misma que la que el pasado año esperaba para el presente curso. La crisis ha hecho su aparición por el Ministerio de Sanidad y se ha manifestado en forma de Orden de Precios de Referencia (PR).
Un proyecto de orden que presenta diversas, y de gran importancia, diferencias con la que rigió los PR en el presente año.
La orden en vigor fue una de las más suaves, si no la más, que se recuerdan ya que no revisó los precios de los conjuntos existentes e, incluso, preveía la posibilidad de que la revisión del anexo de precios menores no fuera obligada a los seis meses de entrada en vigor. Revisión que, finalmente, no se produjo.
Es cierto que la orden venía tras unos años de fuertes recortes de precios, como los impulsados por el RD 2402/04 y que dieron lugar a rebajas de los precios de los medicamentos un 2 y un 4,2 por ciento en dos años consecutivos. Una medida que consiguió el objetivo de reducir el crecimiento del gasto en medicamentos a la mínima expresión.
Ahora, no es que la situación del sector sea mejor, ni siquiera que el gasto en medicamentos esté disparado. La razón de aprobar una orden mucho más agresiva es la crisis económica que ya nos acompaña y cuyas consecuencias no están claras. Por ese motivo, la nueva orden realiza una revisión de precio sobre todos los conjuntos creados anteriormente y, por otro lado, establece que la revisión del anexo 5 sea automática, con los problemas de gestión de stocks que cualquier cambio de precio conlleva.
No se acercan buenos tiempos para el sector, que deberá, una vez más, apretarse el cinturón.
