“Ya vamos tarde”. De esta forma se expresaba la gerente del Sector Salud de Aecoc – GS1 Spain, Mónica Sóler, al referirse a la implementación del modelo de Identificador Único, que exige la conocida como Directiva Antifalsificación 2011/62/EU.
Esta advertencia se produce ya que en algo menos de tres años, en febrero de 2019, todos los estados miembros de la Unión Europea (UE) estarán obligados a cumplir con las especificaciones de dicha normativa, que exige, entre otros requisitos, la inclusión en todos los medicamentos de un código bidimensional (Data Matrix) que tendrá impacto directo en las líneas de producción de la industria farmacéutica.
Los principales escollos se circunscriben a la inclusión o no del denominado Código Nacional de Reembolso, que no es obligatorio en la Directiva 2011/62/EU pero que es una fórmula para adecuar la legislación antifalsificación en los países donde existe el reembolso del coste del medicamentos como en España, Alemania o Polonia entre otros.
Mónica Soler asegura que la decisión correspondiente al Ministerio de Salud y las comunidades autónomas se tomará “inminentemente” y tendrá un cierto impacto tanto para la industria como para las administraciones públicas. A la primera por el esfuerzo inversor en modificar sus líneas de producción y a las segundas porque la elección de uno u otro sistema afecta a las bases de datos que manejan y que actualmente se rigen por ese código nacional.
Esta recomendación de Aecoc GS1-Spain se produjo durante la presentación en Madrid del Congreso Anual del Sector Salud, que el próximo 26 de abril reunirá a más de 200 profesionales de las áreas de gestión y Supply Chain.