Reclama que se proteja la “unidad de mercado” y denuncia los 3.400 millones de deuda hospitalaria

La patronal exige que el catálogo de prestaciones tenga en cuenta los recursos económicos disponibles

| 2010-10-08T16:01:00+02:00 h |

José María López

Madrid

Uno de los principales problemas a los que se tiene que enfrentar la industria farmacéutica radicada en España es que no tiene un único interlocutor con la administración. Una situación que da como resultado, por ejemplo, que hasta hace dos semanas el sector farmacéutico no estuviera incluido en el Plan Integral de Política Industrial 2020, ya que el Ministerio de Industria no observa al sector farmacéutico como uno de los ámbitos que este organismo tiene que proteger, al Ministerio de Sanidad “ni siquiera le preguntan” y el de Ciencia e Innovación tampoco lo propuso.

Al final, según indicó el todavía presidente de la patronal Farmaindustria, Jesús Acebillo, que la semana pasada hizo balance de sus dos años de mandato, “uno por otro, la casa sin barrer”. Por este motivo, la presencia de un interlocutor es una de las principales peticiones que quieren concretar en el Plan Sectorial. Y es que, para Acebillo, la existencia de interlocutores diferentes para cada asunto “no genera estabilidad en el sector”, porque los acuerdos con la parte industrial no son válidos para el decisor sanitario. Y al contrario, los acuerdos con Sanidad pueden no ser válidos para el ámbito industrial.

Con esta coordinación, “tendremos una plataforma de interlocución con la que realizar una hoja de ruta en materias clave”. Así, el empleo, la internacionalización o la I+D, deberán ser monitorizadas para ver si su evolución va en la dirección que Administración e industria quieren.

Deuda de 3.400 millones

Esta interlocución única se ha convertido mucho más estratégica para la industria farmacéutica a causa del fuerte impacto que los dos RDL, el 4/2010 y el 8/2010, han tenido sobre el sector y que darán lugar a que todos los indicadores clave de la industria farmacéutica “se vengan abajo”, tal y como precisó Acebillo. En este sentido, confirmó que para este año esperan “llegar a pérdidas” y que tendrán, además, que esperar a cobrar la factura hospitalaria un promedio de 281 días. Una situación que ya ha generado 3.400 millones de euros de deuda hospitalaria en medicamentos. Con todo, la industria sufre un efecto doble por la crisis económica, ya que se le reduce los precios y, además, no se les paga. En muchos casos, afirmó Acebillo, “cuanto más se vende, más se pierde”. Una situación que supone una amenaza más para la industria farmacéutica.

Para evitar un empeoramiento de la situación, Acebillo reclamó una mayor racionalización de la cartera de servicios del SNS, de modo que se adecue a los recursos económicos disponibles para no “estrangular” a los proveedores. Sin embargo, se mostró pesimista acerca de que este deseo se transforme en realidad, ya que no observa en nadie el “coraje suficiente para decir que las coberturas se reducirán”.

Asimismo, reclamó a los políticos que abandonen la toma de “medidas unilaterales sobre la variable equivocada”, debido a que, según él, “el problema no está en el precio sino en el volumen”. En este punto, se preguntó por el sentido de las reducciones de precios, al estar intervenidos por la administración. “¿Se equivocaron al ponerlos?”, dice.

Por otro lado, reclamó que se pongan en marcha mecanismos para establecer una financiación finalista de la sanidad, porque si no la industria “está perdida”, al tiempo que sería necesario asegurar la unidad de mercado. Según precisó, si se fragmenta el mercado español “nos convertiremos en irrelevantes”. Por ello, pidió al Gobierno que evite la transgresión de competencias centrales por parte de las autonomías en sus políticas farmacéuticas. Preocupaciones que fueron puestas en conocimiento del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en la reunión que mantuvo con la cúpula de Farmaindustria hace unas semanas.

“Saben que se han pasado”

A pesar de la dureza de las medidas que durante 2010 ha tomado el Gobierno y que han afectado de lleno a la industria farmacéutica, Jesús Acebillo, aún presidente de Farmaindustria, confía en reconducir el camino y que 2011 pueda ser el año de la recuperación del sector. Según dijo, el Gobierno es consciente de que “se ha pasado” con las medidas puestas en marcha a través de los dos RDL, el 4/2010 y el 8/2010. Por ese motivo, una de las intenciones que Farmaindustria persigue con el Plan Sectorial es “volver a la senda del Entendimiento”, aunque en la situación actual hay “un gap enorme”, explicó.

En este sentido, el presidente de Farmaindustria espera que el Plan Sectorial detenga la “hemorragia” económica del sector y ayude a “sacarle de la UCI en la que les han metido”. Por ese motivo, se arrepintió de haber participado, aunque fuera mínimamente, en la elaboración del RDL 4/2010 para permitir que los compromisos acordados con el Gobierno pudieran haber sido llevados a cabo. “Si hubiéramos sabido que iba a haber el otro real decreto ley no hubiéramos estado de acuerdo con el RDL 4/2010”, explicó.

Dos ‘decretazos’ que el máximo dirigente de la patronal de la industria innovadora calificó de “dislate político”, al afectar a un mismo sector en un periodo de tiempo de solo dos meses. Algo que, según dijo, no se había producido nunca con anterioridad.