Carlos Arganda Madrid | viernes, 03 de febrero de 2012 h |

La solución a los problemas que tiene la sanidad hoy en día hay que buscarla fuera del sector. Según Esteban Plata, presidente de Abbott, “hay que involucrar a los decisores económicos”, incluido el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en la búsqueda de soluciones de futuro para la sanidad y el mercado farmacéutico en particular. Para él, “tiene que haber una visión global para la solución de los problemas de la Sanidad”, tal y como explicó en un desayuno organizado por PricewaterhouseCoopers la semana pasada.

Según Plata, el primer paso que debería dar la sociedad española es decidir “si la inversión actual en salud es la apropiada” y no empezar a fraccionar análisis sobre diversos aspectos de la sanidad ya que se “tergiversan los debates”. Para el presidente de Abbott, nuestro país está en el grupo de cabeza en función de los estándares de calidad y resultados en salud de los países de nuestro entorno y, al tiempo, es de los que invierten menos recursos. Como resultado, para Plata, “el SNS español es más eficiente que la media de la OCDE”.

Y es que, según explicó, en 2012 en España tenemos una prestación farmacéutica que provee un 60 por ciento más tratamientos que en 2001, a su mismo coste, pero con una innovación, la de los nuevos fármacos, muy superior.

No obstante, y a pesar de esa gran eficiencia, la foto actual refleja una deuda de grandes dimensiones con los proveedores. Pero el problema para Plata no se acaba con la solución a la falta de caja actual y las deudas atrasadas. Según el presidente de Abbott es necesario “resolver la infrafinanciación crónica, recurrente e intencionada” de la sanidad para evitar que este problema de pueda reproducir en el futuro.

Por ello, según Plata la industria no puede ni debe “ser un mero espectador” de lo que ocurre, sino que debe “participar en la creación de un SNS mejor”. En este sentido, las compañías farmacéuticas tienen como responsabilidad el “promover y proponer nuevos modelos que permitan una gestión óptima de los recursos”.

Un ejemplo de esta nueva forma de proceder es su propuesta de tratar la enfermedad músculo-esquelética desde una visión global, tanto su prevención, tratamiento e incluso consecuencias a nivel laboral ya que las bajas laborales por esta causa suponen cinco veces más coste que el tratamiento actual. Pero eso ahora no se tiene en cuenta globalmente, explicó.