Buscar fuera el reconocimiento (autorización) que se niega en ‘casa’. Eso es lo que persigue la Comunidad de Madrid de cara a que su red de farmacias realicen y dispensen test de antígenos dentro de la estrategia de detección y control de casos positivos de COVID-19. La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha remitido una carta a su homóloga de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, solicitando que las autoridades continentales “autoricen esta forma de hacer cribados de COVID-19”.

En concreto, Díaz Ayuso reconoce que el envío de esta carta es consecuencia de que la petición inicial que se ha realizado al respecto al Ministerio de Sanidad, a través de una carta remitida el 3 de noviembre, “no ha obtenido respuesta”, expone. Cabe recordar que la presidenta denunció hace escasos días que ya hayan transcurrido “varias semanas” desde el envío de la solicitud sin réplica ministerial y su vicepresidente, Ignacio Aguado, ha anunciado que se pedirá una reunión expresa del ‘grupo Covid’ que mantienen abierto ambas Administraciones para tratar esta petición.

Silencio ministerial con los test

Es el silencio ministerial a la propuesta, así como la prohibición que refleja la actual normativa nacional, lo que ha llevado a la Comunidad de Madrid a implicar (elevar) a Bruselas en este debate. Cabe recordar que el propio ministro de Sanidad, Salvador Illa, confirmó la recepción del escrito y anunció que se “analizaría” la propuesta junto a los equipos técnico y jurídico del Ministerio.

“La Agencia Española del Medicamento no nos permite actualmente usar centros sanitarios como farmacias y clínicas dentales (para realizar test). Por eso considero útil que las autoridades europeas autorizasen esta forma de cribados, no solo en España sino en otras posibles regiones europeas”, expone Díaz Ayuso a Von der Leyen la misiva. Incluso, como así hizo respecto a la carta remitida a Sanidad, Díaz Ayuso reitera que diversos países europeos “con sistemas sanitarios consolidados”—como Francia, Portugal y Reino Unido— ya están confiando “con éxito” estas pruebas diagnósticas en sus farmacias.

Díaz Ayuso insiste en la misiva a Von der Leyen que “los cribados masivos y los resultados rápidos” que permiten los test de antígenos está siendo clave en la gestión de la segunda ola de la pandemia en la región. “Pero sabemos que no es suficiente para conseguir los objetivos en torno a la incidencia y queremos seguir ampliando nuestra  capacidad de detección”, apunta. En este sentido, defiende ante la presidenta de la CE la capacidad de las farmacias para realizar estas pruebas “porque sus profesionales están capacitados y pueden realizarse en condiciones de seguridad e higiene”.

La CE trabaja en una regulación express de test de antígenos

Tenga o no efectos en esta petición de Madrid, la Comisión Europea anunció recientemente que tiene por objetivo trabajar en una regulación “express” en torno al uso de test de antígenos en el continente.

En concreto, con motivo de una actualización de sus recomendaciones sobre el uso de pruebas diagnósticas de la COVID-19 publicada el Diario de Sesiones de la UE el pasado 30 de octubre, la CE anunció que trabajará “urgentemente” con los Estados miembros con objeto de crear un marco para la evaluación, la aprobación y el reconocimiento mutuo de las pruebas rápidas de diagnóstico y de sus resultados”.

En este mismo documento, la CE insta a que “los Estados miembros deben ponerse de acuerdo sobre los criterios que deben utilizarse para la selección de las pruebas rápidas de antígeno, en particular los relacionados con su rendimiento clínico, como la sensibilidad y la especificidad, y acordar también los escenarios y los parámetros en los que el uso de las pruebas rápidas de antígeno resulta adecuado, como, por ejemplo, las situaciones de alta transmisión comunitaria”. De igual manera, se compromete a que La Comisión pondrá en marcha iniciativas para la adquisición de pruebas con el fin de garantizar un acceso equitativo a las pruebas rápidas de antígeno, así como un rápido despliegue de estas en toda la UE.