El Global Madrid | miércoles, 05 de junio de 2019 h |

Tras analizar la publicación del nuevo Marco Estratégico para la Atención Primaria y Comunitaria aprobado por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, la junta directiva de la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (Sefap) ha destacado el “gran avance” que el mismo supone para “la consolidación” de las funciones que vienen desarrollando los Farmacéuticos de Atención Primaria (FAP) en el sistema público de salud. Esta reacción es totalmente opuesta a la que experimentaron recientemente los farmacéuticos comunitarios en torno a este documento.

En este sentido, la Sociedad hace especial incapie en aquellas acciones de este Marco en las que se especifica el desarrollo de funciones clínicas del farmacéutico de AP que desde Sefap considewran necesarias. La primera de ellas es la necesidad de establecer protocolos multidisciplinares coordinados por el FAP para la coordinación clínica en la utilización de los medicamentos que garanticen la continuidad farmacoterapéutica. En segundo lugar, la sociedad destaca la potenciación del papel del FAP en su labor de formación y apoyo a las y los profesionales en el uso racional, eficiente y seguro de los medicamentos.

En palabras de Ángel Mataix, presidente de Sefap, “es muy importante destacar el papel primordial que el nuevo Marco Estratégico asigna al Farmacéutico de Atención Primaria en la continuidad farmacoterapéutica y en la revisión de los tratamientos en el ámbito sociosanitario. Desde nuestra sociedad siempre hemos manifestado la gran importancia que tiene potenciar el perfil clínico-asistencial del FAP para que pueda consolidarse como un profesional clave en los programas de revisión de la medicación, basados en la colaboración con los médicos de atención primaria en el diseño y seguimiento del plan terapéutico del paciente”.

Creación de la especialidad de FAP

Desde Sefap también se destaca que el nuevo Marco Estratégico para la Atención Primaria y Comunitaria recoja algunas de las reivindicaciones históricas de la Sociedad en relación al establecimiento de una formación sanitaria especializada reglada para la formación de nuevos especialistas.

Mataix destaca en ese sentido la importancia de impulsar la formación y la investigación en atención primaria de Salud, que recoge tres de las necesidades históricas del FAP como son la inclusión de la Atención Primaria en la formación pregrado del grado de Farmacia, la elaboración de un estudio de la situación actual y de las necesidades de profesionales en la Atención Primaria de Salud, y la creación a corto plazo de la especialidad de Farmacia Hospitalaria y de Atención Primaria.