El Global Madrid | lunes, 21 de octubre de 2019 h |

La XI edición del Congreso Farmacéutico de Castilla y León puso el foco en su tercera jornada de debates (día 18 de octubre) en el papel y resultados de la red de Farmacias Centinela de Castilla y León, un ejemplo de “trabajo en red” de estos establecimientos desde su puesta en marcha en 2015.

Se trata de un total de 170 farmacias distribuidas de forma estratégica por toda la Comunidad (teniendo en cuenta, entre otros parámetros, criterios poblacionales) y que se encargan de ejercer una labor de intensa vigilancia para detectar cualquier incidencia que ponga en riesgo la seguridad y el correcto uso de los medicamentos. Desde que el Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León (Concyl) pusiera en marcha este trabajo en red, son cerca de un millar los episodios que han puesto en guardia a las farmacias centinela de la Comunidad.

Concretamente, según los datos actualizados presentados en este congreso, desde 2015 hasta ahora se han detectado 232 reacciones adversas a los fármacos y 760 errores de medicación.

Todas aquellas anomalías que registran las farmacias centinela tienen un importante impacto en la salud de la población. Así, las reacciones adversas implican que un paciente ha tenido una consecuencia clínica por el uso de Los casos detectados por farmacias centinela representan ya el 40 por ciento de las notificaciones procedentes del conjunto de la farmacia de Castilla y León. Su labor es una herramienta clave para garantizar la Salud Pública y la seguridad de los pacientes y, además, han abierto una puerta a nuevos estudios de investigación sobre reacciones adversas que se centran en grupos de medicamentos determinados.

Estudio de (con) las Farmacias Centinela

Precisamente, el presidente del Concyl, Carlos Treceño, ha presentado en este Encuentro celebrado en Valladolid, los resultados de uno de los primeros estudios de investigación realizados gracias a los datos que ofrece esta red de farmacovigilancia.

Dicho estudio ha puesto el foco en las estatinas, los fármacos más empleados para el tratamiento de la hipercolesterolemia y que toman al menos 250.000 pacientes en Castilla y León. El análisis se ha centrado en aquellos pacientes que combinan las estatinas con ciertos fármacos con riesgo de interacción. El resultado es que el 80% de los pacientes que toman dichos combinados presentan ese riesgo (más probabilidad, por ejemplo, de toxicidad muscular, es decir, dolores de piernas, calambres…). Se ha demostrado además que el riesgo más elevado está en su combinación con ciertos antiarrítmicos. También se ha identificado un riesgo mayor de osteoporosis en pacientes que lo combinan con algunos antidepresivos.