El Global Vitoria | viernes, 12 de enero de 2018 h |

Desde el pasado 12 de enero, los ciudadanos vascos pueden retirar su medicación en las farmacias de otras Comunidades Autónomas en las que la receta electrónica sea interoperable (todas, con excepción de Madrid, Andalucía y Baleares, y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla); y los pacientes de las Comunidades con receta electrónica interoperable podrán hacerlo en las farmacias vascas, sólo con aportar su tarjeta sanitaria.

El consejero de Salud vasco, Jon Darpón valoraba las ventajas en términos de seguridad y comodidad del paciente, que supondrá la puesta en marcha de la interoperabilidad y señalaba que el sumarse a este proyecto tendrá una repercusión directa en las personas, en la medida en que favorecerá un uso adecuado y racional de los medicamentos, agiliza el acceso a los mismos, evita visitas a los centros sanitarios una vez prescritos los tratamientos y descarta pérdidas de receta.

“No se trata pues, de una mera innovación tecnológica”, recalcaba Darpón, sino que, “de facto, la receta electrónica interoperable mejora la prestación farmacéutica y la asistencia sanitaria a nuestra población”.

Asimismo, el responsable de la salud vasca animaba al Ministerio de Sanidad, que es el que ostenta la competencia de la sanidad exterior, a trabajar en el seno de la Unión Europea, para poder caminar a que tanto la receta electrónica, como la propia historia clínica digital, puedan ser interoperables con el resto de países de la UE, en beneficio de la población.