Con motivo del Día Mundial del Cáncer, que se celebra el 4 de febrero, el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos quiere destacar la importancia del papel de los farmacéuticos, desde la investigación de nuevos tratamientos, la producción y distribución, la realización de análisis clínicos, la validación, preparación y seguimiento de la quimioterapia en los servicios de Farmacia Hospitalaria, así como la prevención, realización de cribados y seguimiento de los pacientes desde la Farmacia Comunitaria.

En este sentido, uno de los ‘santo y seña’ de la implicación de la farmacia comunitaria en la prevención y lucha contra el cáncer es la participación de boticas en programas de detección precoz de cáncer de colon. Según los datos reflejados por el CGCOF, un total de 1.836 oficinas de farmacia de cuatro regiones —Islas Baleares, Cataluña, Murcia y la ciudad autónoma de Ceuta— participan en estas estrategias mediante la entrega de kits a la población y recogida de muestras para su envío al laboratorio de análisis. Se consigue así mejorar la detección temprana y el porcentaje de cobertura poblacional al aumentar el acceso sin citas ni listas de espera.

En concreto, en Cataluña participan más de 1.400 farmacias (el 43 por ciento de la red regional), más de 300 en Murcia (53% de la red), 102 farmacias en las Islas Baleares (23 por ciento) y 24 farmacias en Ceuta (cien por cien). En 2020, y pese a interrumpirse durante varios meses por la pandemia estos programas, solo en Cataluña y Murcia se entregaron en las farmacias 265.903 kits.

Plan Europeo y medicamentos oncológicos

El presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Jesús Aguilar, ha recordado que en este Día Mundial del Cáncer, “los farmacéuticos dan visibilidad a su trabajo en todas las áreas de ejercicio profesional en las que contribuyen a prevenirlo y a tratarlo, acompañando en todo el proceso al paciente oncológico”.

En este sentido, el Plan Europeo de Lucha contra el Cáncer destaca la importancia de la participación de la atención primaria para alcanzar los objetivos de prevención de manera eficaz. Por ello, los farmacéuticos comunitarios, como parte de la Atención Primaria de Salud, están en una posición ideal para el desarrollo de servicios de prevención, como el de deshabituación tabáquica, o la realización de cribados de prevención que permitan una detección temprana y tratamiento de distintos tipos de cáncer, así como una mejora de la calidad de vida de las personas.

Además, desde el Consejo General de Colegios Farmacéuticos se está promoviendo el avance para una mayor colaboración entre los farmacéuticos de Farmacia Hospitalaria y la Farmacia Comunitaria, para favorecer una actuación coordinada de seguimiento de los pacientes en los tratamientos de dispensación hospitalaria  que pueden administrarse en el hogar – como la quimioterapia oral y los medicamentos biológicos  autoadministrables – para que los pacientes no tengan que desplazarse al hospital para su dispensación.