Los farmacéuticos españoles comunicaron en el primer semestre de 2017 un total de 16 pares de medicamentos que pueden inducir a confusión en profesionales y pacientes por similitud fonética u ortográfica, según los datos difundidos por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos.
De estos 16 pares de medicamentos notificados, 9 de ellos (ver gráfico) han sido detectados por los farmacéuticos y notificados para su evaluación por primera vez. Cabe recordar que estas actuaciones emanan de la campaña “Prevención de errores de medicación ocasionados por similitud fonética u ortográfica en los nombres de los medicamentos” puesta en marcha en 2004 por el Consejo General en el objetivo de alcanzar el uso opcional de los fármacos y a la cual los profesionales vienen respondiendo con una participación activa.
En este sentido, a través de esta campaña, más allá de evitar errores sobre el terreno (en la dispensación o administración) por esta similitud, se pretende concienciar a los farmacéuticos de esa “transcendencia” que tienen los errores de medicación y de la importancia de detectarlos y comunicarlos para desarrollar medidas encaminadas a mejorar la seguridad del paciente.
Alerta en dispensación
Todas las notificaciones que son comunicadas por los farmacéuticos desde el inicio de esta campaña son registradas y valoradas para la toma de medidas al respecto, entre ellas su posible puesta en conocimiento de la Aemps, en su condición de autoridad competente para exigir cualquier modificación denominativa.
Ahora bien, al margen de cualquier iniciativa de la Administración, estas alertas pasan a ser incluidas en la base de datos del Medicamento con la que trabajan todas las farmacias españolas (Bot PLUS; del CGCOF), de tal manera que cuando se vaya a producir la dispensación de un medicamento con nombre similar a otro y del que se haya producido una notificación, al profesional le saltará de manera inmediata una ventana de aviso en el ordenador para confirmar la dispensación y evitar así cualquier confusión.