El Global Seúl | lunes, 11 de septiembre de 2017 h |

La Federación Internacional de Farmacéuticos (FIP) ha señalado en su declaración de Política titulada: “Farmacia: puerta de entrada a la atención”, la importancia de la plena participación de los farmacéuticos en el autocuidado. Esta nueva declaración, adoptada por el Consejo del FIP, reemplaza la declaración de 1996 de la federación “Autocuidado, incluida la automedicación – El papel profesional del farmacéutico”. La Federación pide que los farmacéuticos se incorporen plenamente en los sistemas de salud, tanto para la prevención y el tratamiento de la enfermedad, como para que sean adecuadamente remunerados por la prestación de sus servicios de autocuidado.

La nueva declaración también hace una serie de recomendaciones para las organizaciones farmacéuticas y los farmacéuticos, incluyendo que se debe asegurar que las comunidades rurales tengan acceso a las farmacias y que estas últimas desarrollen y adopten procedimientos operativos estándar para la gestión de la calidad de los servicios de autocuidado como documentación adecuada de la conciliación de medicamentos, apoyo a la adherencia y manejo de medicamentos.

La declaración es la continuación de un informe de 68 páginas, publicado en marzo de este año, titulado “La farmacia como una puerta de entrada a la atención: Ayudar a las personas hacia una mejor salud”. Este informe presenta una colección de pruebas de los servicios de farmacia relacionados con el autocuidado y el valor que los farmacéuticos aportan a los sistemas de salud en este sentido.

“En un creciente número de países, las farmacias se consideran un punto de entrada formal al sistema de atención primaria de salud. Algunos ejemplos notables incluyen un esquema de dolencias menores en Escocia y un esquema de triage en Suiza. Sin embargo, se necesita un mayor reconocimiento de los muchos beneficios proporcionados por los servicios de autocuidado de la farmacia. A través de esta declaración de política, la FIP también se compromete a apoyar a sus organizaciones miembros para desarrollar estándares de calidad para estos servicios en un contexto nacional y continuar abogando por este importante aspecto de la atención de la salud “, aseguraba Paul Sinclair, presidente de la sección de Farmacia Comunitaria de FIP.

Intervención de Carmen Peña

Por su parte, la presidenta de FIP, Carmen Peña, aboga por la generación de empleo en la profesión farmacéutica. “La inversión en profesionales farmacéuticos es necesaria si queremos dar cobertura a la sanidad universal”, apuntó Peña en su discurso de inauguración del 77º Congreso Mundial de Farmacia y Ciencias Farmacéuticas. “Si la prestación de nuevos servicios profesionales es una de las vías para dar cobertura a la sanidad universal, ello requiere un consecuente esfuerzo de inversión en mano de obra profesional”, explicó.

En lo que respecta a la prestación de servicios farmacéuticos, Peña apuntó que los mismos son una parte intrínseca de los sistemas sanitarios y que los nuevos servicios son la respuesta a las nuevas necesidades de una nueva sociedad. Describió estos servicios en cinco campos: salud pública, farmacia clínica, investigación, educación y nuevas tecnologías. “Al igual que con los nuevos medicamentos, donde sabemos la importancia de la investigación en la recolección de evidencia, también debemos aplicar este concepto a los servicios farmacéuticos para poder entender la importancia de demostrar, desde una perspectiva clínica, su efectividad para el paciente y, desde una perspectiva económica, su eficiencia para nuestros sistemas”.

La presidenta de FIP también se refirió a las nuevas tecnologías como un “motor del cambio”, permitiendo la mejor información entre los profesionales sanitarios y el empoderamiento de los pacientes. “Este nuevo conjunto de servicios – servicios digitales – servirá a los otros cuatro campos, ayudándonos a afrontar el reto de las enfermedades crónicas y el desafío de la sanidad universal”, vaticinó.