La Agrupación Farmacéutica Europea (PGEU), que representa a cientos de miles de farmacéuticos de 31 países (entre ellos España) ha vuelto a reclamar a las autoridades sanitarias estatales que “fortalezcan la colaboración con los farmacéuticos comunitarios e integren a estos profesionales en las estrategias de vacunación”.
A juicio de esta agrupación, la inminente llegada de la gripe estacional y el resurgimiento de los casos de Covid-19 en toda Europa supondrán una enorme carga para unos servicios sanitarios “ya de por sí sobrecargados”. La implementación de programas de vacunación contra la influenza en tiempos de Covid-19 será “particularmente desafiante” y es urgente “implementar campañas de vacunación efectivas que puedan ayudar a prevenir las hospitalizaciones, asegurando el acceso y la aceptación adecuados de las vacunas frente a la gripe, especialmente para los grupos en riesgo”. Y es ahí donde la PGEU identifica un importante (mayor) papel de las farmacias continentales.
“No podemos detener el coronavirus todavía, pero podemos mitigar los efectos perjudiciales de una combinación de Covid-19 y gripe estacional en los sistemas de salud en los próximos meses. Recomendamos encarecidamente a los gobiernos nacionales que hagan uso de la red de farmacias de fácil acceso en toda Europa para ayudar en las estrategias de inmunización eficientes y ampliar las oportunidades de vacunación”, ha indicado el presidente de PGEU, el portugués Duarte Santos.
Papel ante la vacunación
¿Qué papel astisba la PGEU para las boticas continentales? De partida, esta agrupación recuerda que “los farmacéuticos comunitarios son profesionales de la salud altamente capacitados y una fuente confiable de información”. Por ello, como primer ámbito, “pueden desempeñar un papel clave en la identificación de pacientes en grupos de riesgo (ancianos, pacientes con enfermedades crónicas, inmunodeprimidos, etc.) y aumentar la confianza de la sociedad en la vacunación”, apuntan.
“Los farmacéuticos deben participar de cerca en la planificación de los programas de vacunación contra la gripe y recibir el apoyo y los recursos adecuados para brindar atención al paciente”, añade Santos. Cabe recordar que en diversos países continentales las boticas son ya puntos complementarios a los centros de salud para inmunizar frente a gripe (sea el acto realizado por los propios farmacéuticos u otros profesionales sanitarios).
