La Asamblea de Madrid ha ampliado el plazo del que disponen las formaciones políticas con representación en la Cámara para la presentación de enmiendas al proyecto de nueva Ley de Farmacia regional. Una ley que, cabe recordar, viene a sustituir a la todavía vigente que data de 1999 y que introduce importantes novedades como la libertad de horarios de las oficinas de farmacia o la posibilidad de que estos establecimientos realicen atención farmacéutica domiciliaria.
Inicialmente, como recogía el Boletín Oficial de la Asamblea de Madrid del pasado 13 de septiembre, los grupos parlamentarios disponían hasta el pasado 27 de septiembre para presentar a la Comisión de Sanidad enmiendas a la totalidad del texto, o hasta el 4 de octubre si se trataba de enmiendas parciales al artículo. Sin embargo, se ha acordado una ampliación de estos plazos de tal manera que los grupos tendrán hasta este 11 de octubre para enmendar a la totalidad o hasta el 18 de octubre si solo afectan a parte del articulado.
Con posibles enmiendas a la totalidad prácticamente descartadas, el próximo 18 de octubre se revela clave para conocer el posicionamiento oficial de las formaciones políticas respecto a la polémica suscitada en torno a la Atención Farmacéutica Domiciliaria, la cual ha generado el rechazo público y notorio de las instituciones representativas de Enfermería —Consejo General de Enfermería, Colegio de Enfermería de Madrid y diversos sindicatos— y una campaña de “oposición” por la cual se han venido manteniendo reuniones con los grupos parlamentarios a fin de conseguir la retirada del proyecto.
Será por tanto a partir del día 18 cuando se conocerá si las formaciones políticas manifiestan algún tipo de rechazo y duda en torno a esta nueva función de las farmacias en forma de presentación de enmiendas al artículo que recoge la AF Domiciliaria. En concreto, su artículo 8 (Capítulo 2) relativo a las funciones de las oficinas de farmacia y en el que se indica que estos establecimientos “sin perjuicio de las competencias propias de otros profesionales sanitarios (…) podrán realizar actividades de atención farmacéutica domiciliaria relacionadas con el seguimiento farmacoterapéutico a pacientes en situación de vulnerabilidad sanitaria y mayores dependientes, adherencia a los tratamientos, reacciones adversas u otras”.
Cabe recordar que el Gobierno regional (Grupo Popular) ya rechazó —tras la petición de las instituciones de Enfermería— realizar cualquier tipo de modificación al respecto en el texto de anteproyecto consensuado desde hace meses con el COF de Madrid. Ahora bien, el posicionamiento del resto de grupos al respecto es importante dado que el Grupo Popular no cuenta con mayoría en la Asamblea, donde se prevé sea debatida y votada la nueva Ley de Farmacia de forma inminente.
Ahora bien, de igual manera que está llevando a cabo Enfermería, también el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid y la empresarial farmacéutica Adefarma están manteniendo encuentros con los representantes políticos para, en este caso, transmitirles las ventajas que acarrea la AF domiciliaria ara una sociedad cada vez más envejecida, crónica y dependiente, la cual desea recibir asistencia en su domicilio. Asimismo, desde estas entidades se recalca que en ningún caso se invaden competencias de otros profesionales y que es la propia normativa nacional la que respalda estas funciones del farmacéutico.
