Alberto Cornejo La Coruña | martes, 25 de junio de 2019 h |

El Pleno del Parlamento de Galicia ha aprobado este 25 de junio su nueva Ley de Ordenación Farmacéutica regional, que sustituirá al texto hasta ahora vigente desde 1999. La votación del dictamen de la Comisión de Sanidad no ha deparado sorpresas y la nueva LOF ha salido adelante, como se preveía, con los 53 votos favorables de PP y PSOE, frente a 17 abstenciones (BNG y En Marea).

Así las cosas, la norma no ha recibido ningún voto negativo de los grupos con representación en el Parlamento de Galicia, si bien en ningún caso hubieran alterado el futuro de la norma dada la mayoría absoluta del PP. Cabe recordar que, como viene informando EG, la nueva LOF se estructura en 70 artículos, de los cuales 54 han sido consensuados en mayor o menor grado entre las distintas formaciones. “Que la norma cuente con el apoyo de PP y PSOE da tranquilidad de que no será una norma de quita y pon”, indicaba recientemente a EG Vicente Álvarez, presidente del COF de Orense.

Como principales novedades, la nueva Ley de Ordenación Farmacéutica de Galicia introduce la prioridad de los farmacéuticos rurales VEC para trasladarse en futuros concursos de botica, la ampliación a 15 años del plazo mínimo para poder transmitir una farmacia intervivos, una mayor flexibilidad horaria de las boticas… Otra de las ‘novedades’ que recogía el proyecto de la norma, como era la posibilidad de que las farmacias pudiesen realizar atención farmacéutica domiciliaria —siendo éste el concepto expreso que recogía el texto— fue modificada prácticamente a última hora para apostar por una venida a menos “entrega informada” de medicamentos a domicilio.

En concreto, al artículo 6 de la LOF referente a esta cuestión (Supuestos especiales de entregas de medicamentos, dentro del capítulo referente a las disposiciones generales de la Atención Farmacéutica ) indica finalmente que se podrá ofrecer este servicio “a aquellos pacientes en zonas rurales que por sus condiciones (físicas o de salud) no puedan desplazarse a la farmacia y siempre que la dispensación en domicilios englobe “la entrega informada y con el cumplimiento de las garantías de dispensación de medicamentos”.

Sí se ha mantenido, en cambio, la decisión también tomada durante el trámite parlamentario de ampliar el ratio de posibles establecimientos prestadores a “una de las cinco farmacias más próximas al domicilio del paciente dentro de la misma zona farmacéutica” frente a la primera redacción que lo limitaba a la “farmacia habitual”. Ahora bien, se establece también la opción de que “por expreso deseo del paciente”, pueda ofrecerse “por otra oficina de farmacia de la misma área de referencia o punto de atención continuada”.

Precisamente, estos cambios en torno a la ‘desaparecida’ Atención Farmacéutica Domiciliaria (al menos con esta denominación expresa) ha copado buena parte del debate final del Parlamento en torno a esta ley. “Las palabras definen mucho de lo que decimos. No es una entrega informada; debe ser una entrega farmacéutica informada. Una entrega es muy simple y esto es un proceso más complejo”, ha indicado Julio Torrado, portavoz de Sanidad del Grupo socialista, quien se ha mostrado “abiertos” a poder cambiar en el futuro esta nomenclatura.

También fue el PSOE quien presentó la enmienda que ha ampliado a cinco el ratio de posibles farmacias del entorno del paciente prestadoras del servicio. “No podemos amazonizar (sic) las farmacias y ver quien tiene los repartidores más rápidos o los mejores precios. Eso no forma parte de la garantía farmacéutica. Por eso planteamos ser los más restrictivos posibles al limitar las posibles farmacias a realizar el servicio, para evitar que farmacias grandes invadan a las pequeñas y facilitar la relación entre farmacia y paciente”, ha vuelto a defender Torrado ante el Pleno. Cabe recordar que si bien esta suerte de ‘retirada’ parcial de la apuesta por la AFD no ha gustado en los colegios farmacéuticos —cuyos presidentes han estado presentes en el debate en el Pleno— sí consideran por el contrario positivo esta limitación que intenta proteger a la farmacia rural.

El resto del debate en el Pleno de esta LOF apenas ha diferido de los previos que se han venido celebrando en la Comisión de Sanidad. Precisamente, la representante popular que ha defendido el texto, Marta María Rodríguez-Vispo, ha recordado que se han atendido 30 enmiendas transaccionales socialistas, 13 del BNG y 2 de En Marea. “Todos estábamos de acuerdo en que la actual LOF no estaba adaptada a la situación actual y las expectativas, tampoco a la farmacia hospitalaria, a la actual coordinación sociosanitaria, la pluripatología, etc. Con esta actualización de la LOF, Galicia y su sociedad se asegura seguir recibiendo una atención farmacéutica de calidad y acorde a sus necesidades”, ha recalcado.

Por el contrario, desde los grupos BNG y En Marea se ha criticado que esta reforma es una “oportunidad perdida” dado que se centra en aspectos comerciales y empresariales y olvida los asistenciales. Sea como fuere, Galicia, y sus farmacéuticos, tienen nueva LOF