José A. rodríguez Barcelona | viernes, 24 de marzo de 2017 h |

Ofrecer un Sistema Personalizado de Dosificación (SPD) en la oficina de farmacia facilita que estas aporten valor añadido a sus servicios. Como explicó Ana Lus, responsable de marketing de la Unidad de Genéricos y del servicio de Medical Dispenser de Cinfa, este servicio “utiliza un blíster compartimentado en días de la semana y por tomas en el que el famacéutico prepara la medicación al paciente que lo necesita”.

Manuel Asín, farmacéutico, señaló que, a su juicio, es importante que las farmacias “cuenten con servicios de este tipo, para que la relación con los clientes no sea meramente transaccional, y aportar valor añadido”. Asín recomendó que, en primer lugar, es fundamental detectar qué clientes se pueden beneficiar de este servicio. Hay que tener en cuenta, además, que, en un primer momento, muchos clientes pueden expresar rechazo, y molestarse porque creen que se les está diciendo que ellos no pueden encargarse de la gestión de la medicación. “Yo ofrezco este servicio a pacientes polimedicados que gastan más de 90 euros al mes, que se desplazan habitualmente, que van a ser hospitalizados o en quienes detectamos problemas de adherencia”. Posteriormente, hay que tener preparado un buen argumentario “para defender las ventajas de este servicio”.