El fin del cupon precinto parece resistirse. Pese a que su eliminación representa un avance significativo hacia la digitalización y modernización de la profesión farmacéutica y, por ende, del Sistema Nacional de Salud (SNS), todavía cuenta con “obstáculos” de cara a materializarse. Este cambio no solo agiliza los procesos de dispensación de medicamentos, sino que también contribuye a la sostenibilidad medioambiental, mejora la eficiencia administrativa en las farmacias, evita errores humanos y simplifica la trazabilidad de los medicamentos. Como consecuencia directa, esta medida impulsa una atención sanitaria más eficiente, segura y acorde con las necesidades actuales del sistema.
Fuentes del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF) afirman a EG que “aunque la voluntad y el objetivo tanto de la Administración como de los colegios de farmacéuticos es la sustitución del cupón precinto por un sistema digital, actualmente de acuerdo a la legislación vigente (Real Decreto 1345/2007) no es posible la eliminación del cupón precinto”, lamentan. En este sentido, sacan a colación que se deben producir, por parte del Ministerio de Sanidad, dos hitos normativos y técnicos imprescindibles. Por un lado, la concreción de las especificaciones del nodo SNSFarma y, por otro, la publicación de una orden ministerial que fije el nuevo procedimiento para la verificación de la factura farmacéutica una vez sustituido el cupón precinto.
“Hasta que estos dos hechos se produzcan, confiamos plenamente en el trabajo del Ministerio de Sanidad para garantizar la coordinación autonómica y el marco legal vigente y nos ponemos a su disposición para colaborar en una materia tan sensible para el adecuado funcionamiento del SNS como es la prestación farmacéutica que reciben los ciudadanos”, garantizan.
Las farmacias de Castellón toman la delantera
Cabe destacar que, recientemente, las 300 oficias de farmacia de Castellón ya han comenzado la sustitución del actual cupón precinto de los medicamentos por un código digital. Así, han sido pioneras en implantar una iniciativa que se extenderá a las farmacias de Valencia y Alicante antes de que finalice el año. De hecho, la Conselleria ya está trabajando para que a partir del 1 de octubre las boticas de estas provincias comiencen a trabajar compatibilizando el recorte del cupón con el sistema de código electrónico, con el objetivo de que se produzca la sustitución total en el plazo marcado.
En palabras a EG, Jaime Giner, presidente del Muy Ilustre Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia (MICOF), remarcó que “la implementación de este nuevo sistema responde a una de las demandas de los Colegios y tendrá un impacto muy positivo para los ciudadanos”. Siguiendo esta línea, aseveró que desde el Consell Valencià de Col·legis de Farmacèutics están “muy satisfechos”. “Trabajar de forma coordinada con todos los agentes implicados en diferentes proyectos está dando sus frutos y nos permite ser pioneros en iniciativas que redundan en la mejora del trabajo de los profesionales y en el bienestar de los pacientes valencianos”, hizo hincapié.
Por su parte, el conseller de Sanidad de la Comunitat Valenciana, Marciano Gómez, alegó que la incorporación de “este código digital de identificación único como justificante de dispensación en la facturación de los medicamentos financiados va a permitir, además, desburocratizar y reducir cargas administrativas ineficaces y desproporcionadas en las oficinas de farmacia, y el compromiso de esta Conselleria con la sostenibilidad medioambiental y la transformación digital”.
Ahorro de costes y más tiempo para el paciente
Al respecto, desde la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE) sacaron a la luz que sólo la acción cotidiana de recortar y pegar el cupón en las hojas de comprobación o en las recetas en papel tendría un coste de 40 millones de euros a nivel nacional. “Si como consecuencia de todo esto, el profesional sanitario tiene más tiempo para dedicar al paciente. Gana el paciente y por ende el sistema”, indican desde la Federación. De hecho, ya en el mes de marzo desde la Federación mandaron un comunicado solicitando la eliminación del cupón precinto. En palabras de su presidente, Luis de Palacio, su no materialización hasta la fecha está relacionada con que “para muchos colegios de farmacéuticos no es una prioridad”. “La facturación con cupón precinto es muy garantista y los colegios y la administración autonómica están muy acostumbrados o acomodados, incluso se ha dicho que la existencia del cupón nos ‘protege’ de terceros que quieren dispensar”, indicó. Sin embargo, aseguró que “todo eso no es verdad”.
Siguiendo esta línea, De Palacio afirmó que “la gestión de los códigos cupones precinto es muy cara, en FEFE estimamos que a las farmacias nos cuesta cerca de 80-90 millones de euros al año“, sostuvo. Por ello, reivindicó la necesidad de invertir en digitalización. “El paso limitante en digitalización nunca está en las farmacias, sino en la propia Administración, que prioriza sólo lo que le interesa”, afirmó. “Si invirtiera en digitalización, en inteligencia artificial y sistemas de datos de la sanidad pública tan solo la mitad de lo que invierte en Hacienda por esos conceptos, tendríamos una Sanidad del futuro”, enfatizó el presidente de FEFE.