Con la llegada del otoño, llegan a las farmacias más cantidad de productos típicos de esta época del año como pueden ser los de caída capilar, fortalecimiento de uñas, productos anti piojos, de cuidado ocular o vitaminas. Por otro lado los productos estacionales de verano, con el fin del mismo, pueden quedar en stock sobrante en muchos establecimientos farmacéuticos, normalmente por una sobreoferta que luego no se consigue vender. 

Los productos más comunes para la época estival y que ahora sobran son fundamentalmente las cremas solares e hidratantes y los repelentes de insectos. 

“No es solo una cuestión de cambio estacional, este año ha habido un gran stock en algunas categorías, por ejemplo la venta de productos relacionados con la COVID (mascarillas, autotests) se ha ralentizado notablemente”, comenta a EG Eva Ruiz, farmacéutica y responsable de consultoría de Asefarma

Técnicas de marketing

Ante esto, la Asociación Madrileña de Asesores de Farmacia (AMAF) ha lanzado unas recomendaciones esenciales para dar salida a estos productos cuanto antes. Se recomienda analizar la cantidad de productos adquiridos para que los comerciantes tengan en cuenta si se han quedado cortos o se han sobre limitado con la compra de ciertos productos. “Depende del almacén y la previsiones de cada local”, afirma Ruiz. Asegura que también es recomendable el desarrollo de ofertas de ahorro para los clientes, que inciten a comprar estos productos fuera de temporada, se recomiendo acudir a 2×1 o a la reducción del 50% en la compra de una segunda unidad, por ejemplo. 

“El marketing de entrada es importante y tiene que haber un escaparate llamativo”

Eva Ruiz, farmacéutica y responsable de consultoría de la Asociación Madrileña de Asesores de Farmacia.

Además un merchandising atractivo actuará como altavoz de las campañas promocionales o sanitarias de prevención que estén planificadas. 

Otra de las recomendaciones es la localización de los ‘puntos calientes’ de las farmacias, para así generar una circulación forzada para el cliente que se fijará en estos productos nada más entrar al establecimiento. “El marketing de entrada es importante y tiene que haber un escaparate llamativo, pero también lo es el de salida, con una circulación que permita ver al cliente las mejores promociones y un mostrador con productos sugerentes”, explica Eva Ruiz. 

“En invierno es más común un incremento de productos enfocados al resfriado y la gripe”

Eva Ruiz, farmacéutica y responsable de consultoría de la Asociación Madrileña de Asesores de Farmacia.

Trabajar correctamente el espacio de la farmacia y mantener carteles publicitarios pueden mejorar significativamente la salida de este stock, que a priori puede parecer perdido con el cambio estacionario. 

Además, la temporada de invierno puede dar salida a algunos productos como las cremas solares, las faciales son muy usadas por esquiadores y como parte de la rutina de belleza de muchas personas. “En invierno es más común un incremento de los complementos dietéticos, y de productos enfocados al resfriado y la gripe”, concluye Ruiz.