Instagram, Facebook, Twitter, YouTube o WhatsApp pueden ser de gran utilidad para el farmacéutico si se emplean de la forma correcta a la hora de compartir mensajes, dar consejos o difundir la importante labor farmacéutica que desempeñan cada día estos profesionales en la oficina de farmacia.
No obstante, el uso de las redes sociales puede compararse con prácticas publicitarias y eso es precisamente lo que no se le permite a la farmacia en determinadas comunidades autónomas: hacer publicidad.
Con el objetivo de aclarar dudas y ofrecer una serie de recomendaciones en este á,bito, la asesoría especializada Asefarma ha elaborado una guía didáctica para el uso para las redes sociales en la farmacia. En un análisis “red a red y uso a uso”, el documento explica qué se debe tener en cuenta para abrir perfil, llenar de mensaje y contenido, publicar y compartir.
Además, la guía contempla un interesante anexo con recomendaciones para organizar el tiempo que se emplea en la gestión de las redes sociales (que, por lo general, no suele ser mucho si quien las gestiona es el propio titular o el personal de la farmacia) y cómo optimizar la organización de contenidos a compartir.
La guía se encuentra en formato PDF y podrá solicitarse a través del formulario existente en la web de Asefarma.
