La Consejería de Salud de Andalucía ampliará a Málaga y a partir de octubre, el proyecto de dispensación de agujas para la administración de insulina a pacientes diabéticos desde las oficinas de farmacia, y en detrimento de su adquisición en centros de salud.
Esta iniciativa, integrada en el Plan Regional de Atención Integral de Diabetes de Andalucía, se inició con una primera fase en Sevilla, cuyas farmacias dispensan estas agujas financiadas desde noviembre de 2016. Los comienzos de este pilotaje generaron cierta polémica por las quejas del colectivo de pacientes respecto a la mala calidad de las agujas —a pesar de que el propio paciente podía elegir la marca—. Sin embargo, dicha situación “se ha ido normalizando y los pacientes están contentos” según confirma a EG Francisco Pérez, presidente de la Federación de Asociaciones de Diabéticos de Andalucía Saint Vincent (FADA). Una satisfacción en la que ha jugado un papel clave “la comodidad que suponen los amplios horarios de las farmacias frente a los que rigen en centros de salud”, confirma el presidente de FADA.
Respecto a la ampliación de esta iniciativa a la provincia de Málaga, las intenciones de la Consejería de Salud de Andalucía pasaban inicialmente por llevarlo a cabo a partir del pasado mes de julio, si bien finalmente no fue posible cumplir con estas previsiones. Será ahora, a partir de octubre, cuando los diabéticos malagueños podrán acudir a las farmacias a por sus agujas de insulina financiadas en vez de hacerlo, como hasta ahora, en los centros de salud.
Paralelamente, Francisco Pérez confirma que se está valorando con la Junta de Andalucía la posibilidad de realizar campañas de información —incluso en las propias boticas— para que el paciente pueda saber la posibilidad que tiene de elegir la marca de las agujas. “Aquellos pacientes ligados a asociaciones sí lo saben, pero otros muchos no son conscientes de esta posibilidad”, apunta Pérez.
